miércoles, 18 de febrero de 2015

El hombre primitivo y su arte



¿Que nos quiso decir el hombre primitivo con su arte?

El hombre primitivo o más conocido como Homo sapiens estupudus, vivió en la tierra, donde la civilización era poco desarrollada, por la falta de escritura, poco desarrollo tecnológico y la escasa contaminación del entorno.

Aquellos llamados hombre primitivo eran los extraños hombres que ambulaban por el mundo antes de que se inventara la escritura y pudiesen legarnos pruebas de su modo de vivir.

Los hombres primitivos empezaron a dibujar hace miles de años, incluso antes de que empezaran a escribir o a construir casas. Nuestros antepasados creían que las pinturas tenían poderes fantásticos, y tal vez las hacían con algún propósito religioso o mágico.

Las pinturas más antiguas que se conocen fueron hechas en las paredes de cuevas y tienen más de 35,000 años. Estas pinturas se han preservado por que fueron hechas dentro de la tierra y han estado aisladas de la lluvia, el sol y el viento. Hay algunas que se conservan en tan buen estado que pareciera que fueron pintadas hace tan sólo unos pocos años.

Los hombres primitivos pintaron sobre las rocas, ellos siguieron las líneas, las hendiduras y los salientes de la piedra para darles volumen a los animales.

Ellos pintaron animales que existían en aquella época, como el mamut, los osos cavernarios y los leones primitivos. Algunas de las figuras las delineaban solamente, mientras que otras las coloreaban para que se vieran más sólidas.

Los principales datos que se utilizan para reconstruir la Historia son textos escritos de épocas pasadas. Pero muchos teóricos aseguran que la mayor parte de la vida de nuestros antepasados se desarrolló en un período en que el hombre aún no había inventado la escritura, por lo que, según ellos, la mayor parte de la historia humana ha de ser reconstruida a partir de escasos restos materiales que se han conservado. Ese período, que hipotéticamente comprende muchos miles de años, recibe el nombre de Prehistoria.

La Historia propiamente dicha comienza con la aparición de la civilización y de la escritura, hace unos cinco o seis mil años. La Historia ha sido dividida en cuatro edades para facilitar su estudio (según criterio occidental): Edad Antigua, Edad Media, Edad Moderna y Edad Contemporánea.

Ellos dibujaban algunas veces unos animales sobre otros para dar la sensación de que iban en manada y se estaban moviendo.

El arte surge con la necesidad de expresión del hombre. Aunque son muchas las divergencias sobre su origen, parece que la más comúnmente aceptada es la que entronca las primeras manifestaciones artísticas con ritos y amuletos mágicos. Al artista prehistórico no le interesaba agradar sino evocar. En la prehistoria, con el pensamiento del hombre centrado en su relación con las fuerzas invisibles de la naturaleza y en la búsqueda de su propio sustento, la representación artística era un medio para atraer mediante misteriosas fuerzas la presencia real de lo inanimado. No es, pues, de extrañar que el hombre recurra a símbolos y animales en sus primeros pasos artísticos.

El carácter mágico de las pinturas, como también de los grabados y figuras moldeadas es una constante y, sin duda, la motivación de dichas manifestaciones. Así, los animales aparecen heridos; las hembras con el vientre hinchado, en gestación avanzada evidenciando la estimulación mágica de las especies útiles.

Estas prácticas forman parte de lo que se denomina "magia simpática", cuyo principio consiste en la convicción de que cualquier acción que se ejecute sobre la reproducción de un ser repercute sobre el original. Entonces, los animales previamente "cazados por la magia" caerán con más facilidad en manos de sus perseguidores.



No hay comentarios:

Publicar un comentario